Prof. Alfonsina del Río
adelrio@speedy.com.ar

lunes, 11 de abril de 2016

Comenio

Juan Amós Comenio 
Comenius es considerado el padre de la Didáctica. Fue teólogo, filósofo y pedagogo. Estaba convencido  de que la educación tiene un importante papel en el desarrollo de las personas:  niños, hombres y mujeres por igual, sin malos tratos, buscando la alegría y motivación de los alumnos.

Texto de su obra más importante para leer: 
Didáctica Magna 

jueves, 4 de julio de 2013

Muestra Itinerante del Museo de las Escuelas

Del 4 al 12 de Julio de 2013 presentamos en la Sede del Instituto Superior de Formación Docente la Muestra " Lo que el Borrador no se llevó" del Museo de las Escuelas de Buenos Aires.
Los invitamos a recorrer y participar de las actividades propuestas:

Clase abierta
Las pedagogías olvidadas:
Carlos Norberto Vergara

Prof. Alfonsina del Río
Historia y Prospectiva de la Educación
Miércoles 10 de julio
15 hs - SUM

Cine documental
Luis Iglesias:
El camino de un maestro

Miércoles 10 de julio
9 hs - Microcine

Exposición
La enseñanza de la matemática en los textos escolares: perspectiva histórica
Profesorado de Matemática: Primer año

Jueves 4 y 11
Viernes 5 y 12

Arquitectura escolar


Arquitectura Escolar - Escuela 16 
Alumno: Néstor Manassero

La Escuela nro. 16 de Mar del Plata, funcionaba entonces en Dorrego 2081, esquina Bolívar, donde hoy está la Escuela de Cerámica, creada en el año 1903, cuando Mar del Plata era todavía un pueblo y la escuela nació entonces en un barrio periférico. Había comenzado a funcionar esta escuela allá por el año 1902 en una casa de la calle Moreno y España, para luego trasladarse a la ubicación señalada, donde funcionaba un corralón propiedad de Luis Curti.
Era común en esta época que los particulares cedieran espacios de tierras para la construcción de escuelas, con el compromiso que luego alquilarían el lugar.
La época señalada se corresponde a normalismo y positivismo pedagógico, a la cual nuestra ciudad también se caracterizó en lo educativo y cuyas bases y finalidades principales fueron disciplinar e integrar consensualmente a los sectores populares y funcionar como una instancia de legitimación y formación política para las élites gobernantes.

Como dice Michel Foucault, en su obra “Vigilar y Castigar”:
El ejercicio de la disciplina supone un dispositivo que coacciona por el juego de la mirada, un aparato en el que las técnicas que permiten ver inducen efectos de poder y donde los medios de coerción hacen claramente visibles aquellos sobre quienes se aplican”
La escuela edificio debe ser un operador de encauzamiento de la conducta. El edificio mismo de la Escuela debía ser un aparato para vigilar; los aposentos estaban repartidos a lo largo de un pasillo como una serie de pequeñas celdas, a intervalos regulares.
Estos observatorios” tienen un modelo casi ideal: el campamento militar.
--“Las instituciones disciplinarias han secretado una máquina de control que ha funcionado como un microscopio de la conducta (…)”
El viejo y tradicional plano cuadrado ha sido considerablemente afinado de acuerdo con innumerables esquemas. Se define exactamente la geometría… la disposición de las filas, de las hileras: se dibuja la red de miradas que se controlan unas a otra … el encaje espacial de las vigilancias jerarquizadas.
Una arquitectura que no está hecha simplemente para ser vista (fausto de los palacios, sino para permitir un control interior, articulado y detallado, arquitectura que habría de ser un operador para la transformación de los individuos: obrar sobre aquellos a quienes se abriga, permitir la presa sobre su conducta, conducir hasta ellos los efectos del poder, ofrecerlos a un conocimiento, modificarlos.
La escuela edificio debe ser un operador de encauzamiento de la conducta. El edificio mismo de la Escuela debía ser un aparato para vigilar; los aposentos estaban repartidos a lo largo de un pasillo como una serie de pequeñas celdas, a intervalos regulares.

Nótese entonces aquí la disposición arquitectónica del edificio de la Escuela nro. 16, que cumple con los parámetros señalados precedentemente.












Normalismo en Argentina


NORMALIMO EN ARGENTINA  (1870-1940)
(Síntesis)

Alumna: Daiana Lucero 



IMÁGENES SELECCIONADAS

El normalismo como fenómeno consecuente del proyecto educativo oligárquico, configurará un perfil del maestro ideal que tendrán que producir las Escuelas Normales Nacionales.
Según Alliaud (1992) la concepción normalización remite al disciplinamiento como un requisito para ejercer el magisterio. "La primera condición para ejercer el magisterio es una conducta intachable y una moralidad probada."
En este sentido que se supone que el maestro debe dar el ejemplo ante sus alumnos, debe enseñar no solo con la palabra, sino también con el ejemplo: "... que predique con los hechos..."
El énfasis se ponía en el aspecto externo de la persona. El maestro debe tener buena presencia, buen porte, buenos modales, etc. Aunque debe tener en cuenta que solo las características de auto presentación, sino también debe ser capaz de inculcar en sus alumnos los valores morales y sobre todo estéticos, considerados como legítimos y permitidos.
Los textos escolares correspondientes de esta época, constituyen un medio de alcance masivo frente a la inexistencia de los "mass media" actuales. En tanto dispositivos didácticos transmiten un sistema de valores y pautas de comportamiento específicas.
  • Moral: Representa un rasgo que atraviesa la misión educadora del maestro. Por lo tanto, supone un sistema de valores característicos del educador, representado por "un bloque sólido de ideas y prejuicios: racismo, higienismo autoritario, ausencia de todo respeto por la integridad y puracidad de los alumnos que el Estado y la familia habían confiado esa misma mañana del primer día de clase."
  • Homogenización: Como hemos mencionado en la primera parte, la política estatal busca por medio de la educación llevar a cabo la consolidación nacional.
El carácter de información y homogenización cultural y nacional es atribuido a directamente a la función educadora del maestro.
Por lo tanto, el maestro deberá encargarse de un reconversión social, transmitiendo contenidos legitimados por el gobierno que contribuyen a lograr un conciencia e identidad nacional argentina.
De este modo, los contenidos se remitirán a historia, geografía, idiomas nacionales, buscando a si inculcar los sentimientos de nación y patriotismo en los alumnos.
El proceso de homogeneización servirá para civilizar a la barbarie, y crear un nuevo sujeto: patriótico y trabajador.
Una manifestación de este rasgo esta representada por el guardapolvo blanco. Concebido este como icono de igualdad, uniformidad, pureza, aunque también significa la imposición de identidades culturales y sistemas de valores, ocultando bajo ese uniforme la diversidad cultural que en aquel momento no fue respetado y fue entendida como barbarie.




Bibliografia:
  • ALLIAUD, Andrea (1992) "Los maestros y su historia: apuntes para la reflexión" En: Revista Argentina de Educación. Año X N° 18, Asociación de Graduados en Ciencias de la Educación, p. 69-91
  • ARTIEDA, T. (2003) "La conformación del sistema de educación pública en Argentina. 1880-1916" Serie Cuadernos de cátedra de Historia de la Educación Argentina. Facultad de Humanidades, Departamento de Ciencias de la Educación.
  • PUIGGROS, Adriana (1990) Sujetos, disciplina y currículo en los orígenes del sistema educativo argentino, Bs. As., Galerna (cap. 1 selección: "La implantación pedagógica"

Normalismo en Argentina



Normalismo en Argentina
Alumna: Smircic, Dana

La escuela Normal de Paraná fue la cuna de los normalistas. El normalismo rápidamente iba adquiriendo una cierta autonomía respecto de las políticas oficiales y de las teorías de la época, que influían también sobre el pensamiento y la actividad de maestros y profesores. Los pedagogos “normalizadores” fueron quienes construyeron los pilares de nuestro sistema a fin de del siglo pasado y principios de éste. El nombre de “normalizadores” también se vincula al hecho de que muchos de ellos fueron egresados de las primeras escuelas normales que se fundaron en el país: de la Escuela Normal de Paraná y de las Escuelas Normales Nº 1 y 2 de Capital Federal. A través de ellas, se difundió una pedagogía que reformo las formas de enseñar y aprender en la Argentina.
El positivismo pedagógico elaboro modelos dirigidos a ordenar, reprimir, expulsar o promover en la escuela sistemática a la población, alcanzando la mayor correlación posible entre raza, sector social y educación proporcionada por el Estado.
La corriente que denominaremos normalizadora, predominante en la docencia, se sentía apóstol del saber y consideraba que educar al ciudadano era una misión.
El método, la organización escolar, la planificación, la evaluación y la disciplina eran las nociones que organizaban su práctica. Desde el Ministerio de Educación de la Nación y los ministerios provinciales pretendían que se clasificara todo en registros de asistencia y de conducta, en bitácoras y boletines de calificaciones.
La concepción normalizadota, fue influida por el higienismo, una corriente médica y sociológica que tuvo mucho auge en la Argentina. La preocupación por hábitos higiénicos, alimentarios y sexuales se acrecentó con la llegada de los inmigrantes, que veían bruscamente cambiadas sus condiciones de vida. El higienismo avanzo y penetró la vida cotidiana de las escuelas. Los mobiliarios escolares fueron cuidadosamente seleccionados para prevenir la escoliosis y garantizar que las más manos limpias reposarían ordenadamente sobre los pupitres para evitar los contactos sexuales; el beso, tachado de infeccioso, fue prohibido: los guardapolvos eran impecablemente blancos, los libros, desinfectados. La escuela se convirtió en un gran mecanismo de adaptación a las normas.

Imágenes seleccionadas

La táctica escolar”


Esta expresión se usaba desde 1880 en las escuelas argentinas. En un artículo publicado en 1884 y titulado “La táctica escolar”, un colaborador anónimo de la Revista de Educación de la Dirección General de Escuelas de la provincia de Buenos Aires decía “los movimientos que maestros y alumnos necesitan ejecutar en la escuela tienen mucha semejanza con los movimientos militares, y como éstas deben tener aquéllos una táctica especial” (citado en: Pineaum1997, p.95). La táctica escolar, entendida como un sistema de señas y movimientos, ayudaba a lograr el orden, ahorraba tiempo y creaba en los alumnos el hábito de la obediencia, y traía la uniformidad en los movimientos, tal como se puede observar en la imagen.

Esta imagen fue extraída del: Álbum de fotos enviado a la Exposición Universal de París, Buenos Aires, Witcomb, 1889.



Los normalizadores fueron los que impusieron su concepción del vínculo pedagógico y estructuraron las bases de una relación entre maestros y alumnos en el aula por largos años.

Tal como se muestra en la imagen, los normalizadores desarrollaron un sistema de clasificación y diferenciación de los alumnos según sus edades, progresos y orígenes sociales


La inclusión de la Educación Física se produjo entre 1895 y 1898, en las Escuelas Normales de Maestras y Profesores. Para la configuración de la educación física argentina hubo dos corrientes o ideas doctrinarias:

  1. Una que identificó a la gimnasia con ejercicios militares. Corriente que surge de las necesidades guerreras que había generado el estado en formación, tanto por guerras de la independencia como por los peligros externos, por ejemplo, problemas limítrofes. Reflejo de ello es la creación de la Escuela de Gimnasia y Esgrima del Ejército en 1897.
  1. La otra idea doctrinaria corresponde a la que puso énfasis en dos aspectos:
  1. La salud y la utilidad de los movimientos encarados de forma científica, apoyándose en las ideas y conocimientos de fisiólogos europeos de la época: Esteban Marey (1830 - 1904), Fernard Lagrange (1845 - 1909), George Demeny (1850 - 1917) y Philippe Tissie (1852 - 1935) (SOLÍS-FERRO, 1996: 3-4; LANGLADE-LANGLADE, 1970:28).
    1. La educación, apoyada en la obra pedagógica de José María Torres - 1895), Benjamín Zorrilla (1840 - 1896), Francisco Berra (¿? - 1906), José Zubiaur (1856 - 1921), Pablo Pizzurno (1865 - 1940) y en el Congreso Pedagógico Internacional de Instrucción Primaria y el Congreso Internacional para la propagación de los Ejercicios Físicos en la Educación, realizados ambos en París en 1889 (CALVO, 1996: 39)

Es este último aspecto doctrinario el que podríamos definir como Educación Física Normal.

Bibliografía:

  • AISENSTEIN, A., 1998, “Historia de la educación Física escolar en Argentina”, Revista del Instituto de Investigaciones en Ciencias de la Educación, Año VII - Nº 13, Facultad de Filosofía y Letras UBA, Bs. As.
  • PERAZZO, CUQ Y De JOSE, s.d. “Historia de la Educación y Política Educacional Argentina”
  • ROMERO BREST, E., 1910, “Evolución de la Educación Física en la Escuela Argentina” Recopilación: Censo 1909 y Revista de la educación física 1910, Bs.As.
  • PUIGGROS, Adriana,2003 “Que paso en la educación” Breve historia desde la conquista hasta el Presente
  • -DUSSEL, Inés y CARUSO, Marcelo (1999) La invención del aula”.